La UE reacciona a las medidas arancelarias establecidas por Estados Unidos
Se observa una menor exportación hacia mercados como Reino Unido y Estados Unidos donde sus políticas comerciales están generando incertidumbre entre las empresas.
Como venía anunciando hace tiempo, desde el pasado 23 de marzo, Estados Unidos hizo efectivo el establecimiento de medidas de salvaguardia en forma de una subida de aranceles a la importación de determinados productos de acero y aluminio provenientes de la UE.
Como respuesta a esta subida unilateral, el pasado 18 de mayo, la Comisión Europea comunicó a la Organización Mundial de Comercio (OMC) los productos provenientes de Estados Unidos que estarían sujetos a los nuevos aranceles. Estos se aplican desde el pasado 22 de junio a través de su publicación en el Reglamento (UE) 2018/886. Esta respuesta se establece, por tanto, de acuerdo a la normativa establecida por la OMC que le permitiría a la UE establecer medidas de salvaguardia para compensar el daño causado por la subida de aranceles establecida por Estados Unidos.
De acuerdo al artículo 2 de dicho reglamento, los derechos adicionales se aplicarán en dos fases:
- A partir del 22 de junio de 2018 se aplicarán derechos adicionales ad valorem de un tipo del 10% y del 25% a los productos enumerados en el anexo I del Reglamento.
- A partir del 1 de junio de 2021, bien a partir del quinto día siguiente a la fecha de la adopción por parte de la OMC de una resolución en la que se afirme que las medidas de salvaguardia de los Estados Unidos son incompatibles con el Acuerdo de la OMC, si esto se produce en una fecha anterior. En este último caso, la Comisión publicará en el Diario Oficial de la Unión Europea un anuncio en el que se indicará la fecha en la que se adopte dicha resolución.
Estas medidas no se aplicarán a aquellas mercancías originarias de Estados Unidos que fueron exportadas a la UE antes del 22 de junio, o para aquellos productos para los cuales se ha expedido una licencia de importación con una exención o una reducción de derechos antes del 17 de mayo de 2018.
La lista de los productos incluidos se puede consultar en el citado Reglamento (2018/886), en http://www.boe.es/doue/2018/158/L00005-00018.pdf.
Navarra comienza el año con una mejora sustancial de su sector exterior
De manera contraria al año pasado, los primeros meses del año están siendo favorables para el sector exterior de Navarra. Si durante el 2017, el descenso de la exportación de las principales ramas de nuestra economía incidió negativamente en la cifra global, en los primeros meses de 2018 está ocurriendo lo contrario. En abril, las empresas navarras exportaron mercancías por valor de 777,6 millones de euros, un 24,3% más que en 2017. El saldo comercial fue un 50% superior, por valor de 357,7 millones de euros. Todas las ramas aumentaron sus ventas al exterior, salvo productos químicos.
En los cuatro primeros meses del año las exportaciones alcanzaron los 3.034,9 millones de euros, un 10,5% más que hace un año. Las importaciones aumentaron, pero en menor medida, un 4,5% lo cual se tradujo en un saldo comercial de 1.381,5 millones de euros, un 18,7% más que hace un año.
La diferencia radica en el crecimiento de las exportaciones de las tres principales ramas exportadoras de la economía foral. La automoción creció un 1,2%, un 22,8% los bienes de equipo y un 12,8% la alimentación y bebidas.
Por tanto, los buenos datos del Índice de producción industrial se traducen también en un incremento de las ventas al exterior y reflejan los buenos datos de crecimiento de la economía en su conjunto en el primer trimestre del año (del 3,3% interanual).
En cuanto al destino de las exportaciones destaca México, que se posiciona como primer destino no europeo de las exportaciones navarras y hacia donde las exportaciones crecieron un 154,4%. Por el contrario, las exportaciones al Reino Unido siguen descendiendo, un 33% entre enero y abril así como a Estados Unidos, un 19%.
Desde Cámara se valoró como coyuntural el descenso de sus exportaciones en 2017, y ligado a factores puntuales, o particulares de cada una de las ramas más importantes (automoción y bienes de equipo) y no tanto a una pérdida de competitividad o a un “problema general” con nuestro sector exterior. No obstante, y sin disponer de información detallada, se observa una menor exportación hacia mercados como Reino Unido y Estados Unidos donde sus políticas comerciales están generando incertidumbre entre las empresas.